Por: Walter Spurrier 

El mundo empresarial esperaba una segunda vuelta Arauz-Lasso, ahora se encuentra con un empate técnico para segundo lugar. Hay la posibilidad de una segunda vuelta entre el candidato correísta, de izquierda populista, y de Pachakútik, de izquierda mariateguista. ¿Qué puede esperarse del manejo económico, con Arauz o Yaku Pérez de presidente? Para el grueso de los empresarios, es decidir por el mal menor.

Los resultados preliminares de la primera vuelta hicieron caer la cotización de los bonos, clara señal que la baja votación de Lasso tomó al mercado por sorpresa. Pero el riesgo país solo subió 99 puntos base, o sea 1%. En sus informes a clientes, los bancos de inversión indican que el próximo gobernante, aunque de extrema izquierda y antisistema, no puede prescindir del apoyo financiero de las multilaterales. Lo que pone límites a sus políticas económicas heterodoxas. Adicionalmente, estiman que gracias al reperfilamiento, el peso de servir la deuda en bonos se aligeró, por lo que un gobierno de izquierda no tiene por qué declarar una nueva moratoria.

Andrés Arauz ha sido muy duro por partida doble en contra del acuerdo con el Fondo Monetario. Primero, que Moreno recibe el grueso del dinero, comprometiendo reformas que debe cumplir su sucesor. En ese aspecto, Arauz tiene razón. Segundo, que el acuerdo con el Fondo compromete a políticas públicas, como la reducción del gasto, con las que Arauz está en total desacuerdo. Señaló que puede prescindir del Fondo Monetario y buscar apoyo financiero de China. Ataca la monetización de activos, programa que inició Rafael Correa con los campos Shushufindi y Auca y propuso continuar con la hidroeléctrica Sopladora.

Arauz, el martes después de las elecciones, ratifica su oposición al proyecto de ley llamado de Defensa de la Dolarización, enviado a la Asamblea el lunes anterior. La ley pretende liberar al Banco Central de la férula del Ministerio de Finanzas, para que el Banco Central, con un directorio propio el lugar de la Junta de Regulación, priorice la salud monetaria y la estabilidad. Es el principal compromiso de Lenín Moreno con el Fondo.

Arauz ratificó que se propone tomar los fondos que administra el Banco Central, a los que llama fondos públicos, y gastarlos, cuando son fondos de los depositantes de la banca privada y pública, que los bancos deben depositar en el Central.

Mensaje de Bélgica

Rafael Correa desde Bélgica amenaza a los gremios empresariales, la banca y los medios de comunicación, llamándolos traidores que deberán pagar su traición. Del discurso de Correa se desprende que Arauz no respetará el orden constituido. Llamaría a muerte cruzada o buscaría un pretexto para remover de la Asamblea a los legisladores de oposición, como hizo Correa, removería a las cortes suprema y constitucional mediante ¨poder popular¨, pondría fin a las elecciones libres y hostilizaría a la sociedad civil.

Si se establece un régimen autoritario, se rompe con las multilaterales y se busca la reactivación consumiendo el dinero que los depositantes de la banca tenemos en el Central y emitiendo dinero electrónico sin respaldo, Ecuador ser acercaría a Venezuela.

¿Cuál es el verdadero Arauz?

En conferencia virtual organizada por dos fondos de inversión, y en contraste con lo que dice para adentro, Arauz se manifiesta conciliador. Habla sorprendentemente bien del reperfilamiento de la deuda en bonos. Expresa que está ansioso de renegociar el acuerdo con el Fondo, lo cual es lógico puesto que un nuevo presidente no va a hacer suyos los compromisos del gobierno predecesor. Renegociación no quiere decir repudio. Ratifica que sería suicida abandonar la dolarización. El problema es que Arauz considera que las medidas que propone, como tomar los fondos privados que están en el Central, la emisión de dólares electrónicos (sin respaldo) y elevar el ISD al 27%, fortalecen la dolarización, cuando en realidad, son golpes mortales.

De Yaku Pérez se sabe menos, puesto que su discurso de campaña es mucho más simple: defender el medio ambiente, el tema prioritario para el electorado joven. Pérez habla de repudiar la deuda externa ilegítima, lo que se pensó refería a la deuda en bonos, pero recientemente aclaró que se refería a la deuda con China.

Desde el punto de vista ideológico, Pérez es mucho más radical que Correa/Arauz. Expresa que las tres maneras de hacer dinero son heredar, sacarse la lotería y robar. Lo que tiene sentido desde una perspectiva marxista, que el capital no crea riqueza. Es crítico de una economía de escala: que no se justifica que las propiedades agrícolas sean más grandes que una finquita para abastecerse de alimentos. Su sociedad ideal es la preindustrial. La preparación de Pérez es en derecho, y no se le conocen asesores económicos. Hay enormes dudas sobre como manejaría la economía, hoy que se requiere gran habilidad por la magnitud de la crisis.

Doble limitante

Pero Yaku Pérez tendría el mismo limitante que Arauz: la necesidad del financiamiento del Fondo y las multilaterales. Además, ha manifestado su vocación democrática y respeto a la institucionalidad política. Su accionar estaría limitado por el ordenamiento jurídico y sus iniciativas legislativas tendrían que ser aprobadas por una Asamblea que no tiene mayoría. Si maneja mal la economía, serían solo cuatro años, y probablemente en 2025 subiría un gobierno de otra tendencia.