Por: Fabricio Cadena Macías
CIO DEL GRUPO LA GANGA, CONSULTOR Y ASESOR EN TICS
Repensar las operaciones en la nueva era
Ante el desafío de un mundo de negocios cambiante y ahora de la pandemia mundial, las organizaciones sufren una enorme presión para transformar sus empresas con el fin de seguir siendo más competitivas en una época de disrupción.
Dentro de las industrias las áreas de: operaciones, logística, aprovisionamiento, fabricación y distribución se encuentran en el top de los desafíos y búsqueda de nuevas formas de trabajar, debido a la nueva normalidad. La pandemia que hemos vivido en el último año ha acelerado el cambio que muchos consideraban ir lento pero seguro o no pensaban hacer. Esta crisis que se vive en la cadena de valor y las finanzas debido a las interrupciones es muy significativo como para no hacer nada. Definitivamente más de una empresa en el sector industrial en que se ubiquen, han aprendido que muchas de sus funciones o procesos operativos no estaban preparadas para lo sucedido. Entonces es importante que repensar completamente la organización en cuanto a procesos y capacidades para poder mantenerse pase lo que pase en el presente y futuro.
Las crisis son la vitamina para la innovación y cambios
Aquí es donde pueden la solución digital y la transformación digital ayudar. Ahora bien, muchos mezclan entre digitalizar y automatizar. La primera es solo usar tecnología para hacer algo, la segunda es poner a un sistema inteligente a hacer algo que una persona hoy hace. La transformación digital no es una metodología por sí sola, es una cultura que cobija a las personas contribuyendo a cambiar los procesos y modelos de trabajo, de tal forma que sean más eficientes.
En un estudio de McKinsey del 2021 (Busellato, Drentin, Nair, Schlichter, Kishore y Singh) mencionan algunos puntos; mencionaré dos puntos guías que las industrias pueden utilizar para su proceso de digitalización: toma de decisiones y optimización basadas en datos. Para esto involucra un procesamiento que quizás no tenemos disponible o el costo no está en las cuentas para la inversión.
Concuerdo con este artículo y creo que todo esto es necesario, pero también es importante saber responder a la pregunta que muchos se hacen: ¿cuánto va a costar? desde mi punto de vista, la respuesta es fácil de encontrar si sabemos que no queremos depender de un departamento de TI grande y queremos reflejar todo en el OPEX más que un CAPEX. Entonces, siempre trato bajo esa premisa de mostrarle a las empresas que tienen dos posibilidades: comprar la infraestructura o rentarla. Más viable ahora es la renta en cloud (nube) en la cual pueden escoger entre varios: Amazon, Google, Oracle, Microsoft, etc. Pero para poder tomar ese camino las empresas deben tener presente entre cuatro cambios en su modelo operativo para acelerar ese recorrido.
Los desafíos de la nube
Es común tener dificultades para definir la estrategia para ir a la nube, por lo tanto, no ven fácilmente el valor que conlleva la adopción de la misma. Algunos son los beneficios: eficiencia y flexibilidad operacional, reducción de costos, entre otros. De manera similar a la automatización, la infraestructura en la nube permite a las empresas obtener capacidad informática y de almacenamiento a pedido, omitiendo procedimientos burocráticos y gastando segundos en aprovisionar un entorno en lugar de esperar semanas
La dificultad de migrar a la nube para muchas industrias tiene que ver con el modelo de TI en lo operativo, procesos, metodologías y el statu quo. Por eso planteo algunas opciones que pueden ayudar a superarlo.
Disminuir lo manual. Muchas empresas todavía tienen procesos manuales, usan papeles para firmar y como respaldo de aprobaciones. Si en su empresa todavía usan vales de caja en papel o pagos mediante cheques en su mayoría, tiene mucho por hacer antes de seguir el camino a la nube en forma inmediata. Si ud. quiere ir a la nube, pero debe necesita firmar un vale de caja para movilización o debe pagar a un proveedor con un cheque en lugar de transferencia, definitivamente, no le va a ayudar el irse a la nube y tener disponibilidad remota del sistema y los procesos.
Múltiples sistemas. Hay empresas que usan diferentes sistemas para sus operaciones, es decir tienen varios fabricantes. Aunque la nube les permite crear servidores en los ambientes que necesiten, es mejor tener un solo servidor en la nube que soporte todos los sistemas, así los costos son menores en cuanto a cantidad de recursos. En lo posible deberían de tener una sola marca.
Rediseñar el área de TI. Al no contar con infraestructura de servidores locales, deben de evaluar el nuevo rol que tendrá su personal de TI. Esto también comprende evaluar al personal para conocer si tiene las habilidades necesarias para trabajar ahora de esta manera. Ya no hay servidores físicos que mantener o respaldar. Esto inevitablemente implica reducción de su nómina en TI.
Normativas. Antes de tomar la decisión, debe conocer que tipos de normas o reglas existe en su segmento de la industria, puede que se tope con alguna que no le permita ir completamente a la nube o deba pedir a sus proveedores del servicio en la nube si puede solucionar esa brecha.
Conclusiones
Todo esto es importante, pero para salir de esta recesión con innovación, es necesario cambiar los comportamientos y la mentalidad, comenzando desde arriba, dejar de pensar entre otras cosas que es más seguro contar con mis datos en mi edificio, tener mi propia infraestructura. ¿Tener su propio datacenter le ayudó en la pandemia? El acceso remoto y disponer de los sistemas desde donde estén sus empleados, clientes y proveedores es lo que más necesitó.
Las organizaciones ahora pueden aplicar las lecciones que aprendieron durante la pandemia para rediseñar y remodelar las funciones operativas y preparar el camino hacia ir a la nube. Deben fijarse como meta ir más allá de la rentabilidad e incluir la resiliencia como corazón de las decisiones operativas. La digitalización y la integración le permitirán responder con mayor rapidez y agilidad a las condiciones cambiantes
La nube puede convertirse en una importante fuente de ventaja estratégica para las empresas. Es el momento de iniciar el camino.