Por: Dirección de Estudios CIG
Xavier Andrade / Iván Pisco / Leonard Quinde

 

En años recientes ha existido un interés notorio, tanto desde el sector privado como desde el Gobierno, por promover políticas y acciones orientadas a dinamizar las inversiones en Ecuador, específicamente aquellas originadas en el sector privado.

De momento, existen resultados mixtos respecto a las acciones emprendidas, ya que por un lado se rescatan noticias como la de los contratos de inversión celebrados, pero por otro, ciertos indicadores denotan que el dinamismo de las inversiones todavía es insuficiente incluso para recuperar niveles pre pandemia.

Uno de los principales indicadores macroeconómicos observados para evaluar la dinámica de inversiones, es la Formación Bruta de Capital Fijo FBKF, definida como la inversión realizada por un país, representada por la variación de los activos fijos no financieros tanto públicos como privados (total de adquisiciones, menos ventas de activos fijos), en un período determinado. Este indicador considera que no todo el presupuesto de un proyecto de inversión público o privado es destinado al incremento de activos fijos no financieros, y, por lo tanto, dicho presupuesto no es contabilizado en su totalidad para el cálculo de la FBKF. Dadas las condiciones previas, la FBKF puede considerarse como un indicador de crecimiento económico debido a que refleja el incremento de la capacidad productiva de un país, siendo necesario observar, que este indicador, junto al indicador de variación de existencias, forman parte del componente de Inversión de la ecuación del Producto Interno Bruto.

Durante 2022, en Ecuador la FBKF total (pública + privada) sumó USD 24.539 millones, registrando un incremento, en términos reales, de 2,5%, mientras que en ese mismo año la economía ecuatoriana creció, en términos del PIB, en 2,9%. Pese a las variaciones antes descritas, la FBKF a 2022 resultó inferior (en términos reales) en 13% a su nivel de 2019, siendo necesario considerar que el PIB también se situó por debajo de su nivel pre pandemia (-1,0%). También debe observarse que en 2022 la FBKF representó, en términos reales, el 20% del PIB, ubicándose 1,7 puntos porcentuales por debajo de la relación FBKF/PIB promedio de 2017-2021, y 6,8 puntos porcentuales por debajo de la relación máxima observada en años recientes (27%, en 2013 y 2014). Ver gráfico No. 1

Uno de los mayores rubros que conforman la FBKF para el caso ecuatoriano, es el de trabajos de construcción y construcción (incluye: trabajos de preparación de terreno; construcción de edificios residenciales y no residenciales; construcción de obras de ingeniería civil; servicios de instalación, acabado y finalización de edificios), mismo que en 2022 registró un incremento de 0,3%, pero que se mantiene un 25% por debajo de su nivel pre pandemia (2019). A continuación, se ubica el rubro de maquinaria, equipo y aparatos eléctricos, el cual en 2022 registró un incremento de 4% respecto 2021, teniéndose además que la FBKF orientada en este tipo de productos ha logrado superar sus niveles pre pandemia, registrándose un incremento de la misma a razón de 2% por año entre 2017 y 2022. Ver cuadro No. 1

Inversión societaria

La inversión societaria, en términos generales, es la inversión conformada por los actos jurídicos aprobatorios que provienen de la constitución y domiciliación de compañías, y de aquellos que resultan de los aportes de capital de las compañías existentes. Para el efecto, se consideran las operaciones realizadas por personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras.

Durante 2022, la inversión societaria total (nacional + extranjera) sumó USD 2.648 millones, lo que representó un importante incremento de 53% respecto a 2021, teniéndose además que entre 2017 y 2022 este indicador se incrementó a razón de 14% por año, aunque ambos resultados se ven influenciados por una operación, de origen uruguayo, realizada en junio-2022 y que podría considerarse como extraordinaria, dado el monto de USD 765 millones que implicó dicha operación (considérese además que entre 2017 y 2021, el ritmo de crecimiento de la inversión societaria fue de 6% por año).

Entre enero y abril de 2023, la inversión societaria sumó USD 239 millones, registrándose una contracción de 51% respecto 2022 (-47% respecto enero-abril 2021, y -49% respecto enero-abril 2020). Cabe señalar que este desplome en la dinámica de estas inversiones se manifestó incluso desde inicios del año, aunque fue mucho mayor en marzo y abril (variación enero-2023 versus enero-2022: -31%; febrero: -14%; marzo: -71%; abril: -66%). Ver cuadro No. 2

En lo referente al origen de las inversiones, en términos generales, durante 2022 USD 1.405 millones correspondieron a operaciones originarias de Ecuador, equivalentes al 53% de la inversión societaria total de dicho año (entre 2017 y 2022, esta participación fue en promedio de 55%). Durante 2022, la inversión societaria de capitales originarios de Ecuador se incrementó en 36% respecto 2021, mientras que la proveniente desde el extranjero se incrementó en 79%; en cambio, para enero-abril 2023, la inversión originaria de Ecuador se contrajo en 39% respecto al mismo período de 2022, y la proveniente del extranjero lo hizo en 67%. Ver cuadro No. 3

Visto por actividad económica receptora de la inversión, durante 2022 destacaron las inversiones realizadas en el sector de actividades financieras y de seguros, aunque esto nuevamente se debió a la operación extraordinaria de origen uruguayo antes mencionado (sin embargo, cabe señalar que este sector también se situó en 1er lugar durante 2021, pero para el período enero-abril 2023 se sitúa en 4to lugar). Entre enero y abril de este año, el sector comercio se ubicó como el de mayor inversión societaria receptada, seguido por el de actividades agrícolas, pecuarias, silvícolas y de pesca, mientras que en 3er lugar se ubicó la industria manufacturera.

Para fines referenciales, en el cuadro No. 5 se presentan las 25 mayores inversiones societarias realizadas durante 2022, según las empresas receptoras de las mismas, teniéndose que estas concentraron el 72% del total registrado en dicho año. De igual manera, para fines referenciales, las 25 mayores empresas receptoras de inversiones entre enero y abril de este año, representaron el 62% de la inversión societaria total de dicho período.

Inversión Extranjera Directa IED

La IED, en términos sencillos, mide el saldo total de una inversión que es de propiedad o que se encuentra bajo control por personas naturales o jurídicas extranjeras, domiciliadas en el extranjero, o que implique capital que no se hubiere generado en Ecuador. Esta inversión puede entrar al país ya sea a través de empresas transnacionales, a través de asociación con capitales privados, o a través de asociación con capitales públicos nacionales.

Durante 2022 la IED en Ecuador sumó USD 788 millones, lo que significó un incremento de 22% respecto 2021 (+USD 141 millones). Cabe señalar que la IED en Ecuador tiende a mantener un comportamiento errático, llegando a intercalarse caídas e incrementos importantes entre un año y otro. Otro elemento común en lo que se refiere a la IED en Ecuador, es la considerable participación que mantiene la actividad de minas y canteras como actividad receptora de estos flujos, pero incluso este flujo se comporta de manera errática, teniéndose que en 2022 fue mayor la salida de capitales respecto a la entrada de los mismos, de manera que la IED en minas y canteras registró un saldo negativo de USD 198 millones. Ver cuadro No. 6

En lo referente al origen de la IED captada por Ecuador, para el período 2017-2022 la Unión Europea se posiciona como el principal bloque originario de estas inversiones (con una participación de 23% respecto al total captado durante el período referido), ubicándose luego MERCOSUR (aunque esto obedece principalmente a la operación ejecutada en junio-2022 y que fue mencionada en el apartado de inversión societaria). Visto por países, destacan: Uruguay (tomar en cuenta misma situación expuesta para MERCOSUR) (participación de 18% respecto a la IED total captada entre 2017 y 2022), España (12%), Canadá (7%), China (7%), Estados Unidos (7%), Países Bajos (5%), Inglaterra (4%), Islas Caimán (4%), Bermudas (4%), Chile (3%), Alemania (3%), Suiza (3%), Nueva Zelandia (3%), México (3%), y Costa Rica (2%).

Ver cuadro No. 7

Iniciativa “Inversión para la Reactivación del Ecuador”

La Cámara de Industrias de Guayaquil, como organización técnica y propositiva, comprometida con la generación de políticas públicas  que promuevan un entorno amigable con la iniciativa privada, la creación de empleo y la mejora de la calidad de vida de los ecuatorianos, ha aportado continuamente  -tanto a nivel local como nacional- con propuestas que promuevan un Ecuador más libre y próspero, de oportunidades para todos, conscientes de la importancia que tiene ser ese puente entre el sector público y privado.

Es por esto que, entre otras iniciativas, ha desarrollado la Iniciativa “Inversión para la Reactivación del Ecuador”, en cooperación con el Instituto Ecuatoriano de Economía Política (IEEP) y con el aporte de diferentes representantes de organizaciones de la sociedad civil, la academia, sector público y privado del Ecuador, con el objetivo de brindarle al Gobierno propuestas viables y necesarias que se pueden realizar desde el poder Ejecutivo sin necesidad de pasar por la Asamblea Nacional.

La iniciativa cuenta con 5 ejes temáticos que han sido considerados como los más prioritarios y de ágil implementación, como son:

  1. Falta de financiamiento
  2. Trámites y estructura de costos
  3. Incentivos e impuestos
  4. Emprendimiento
  5. Mercado Laboral

Sobre la base de estos ejes, que fueron construidos de la mano de 72 representantes de diferentes instituciones en 6 reuniones diferentes, se elaboraron una serie de propuestas para el Ejecutivo, algunas de las cuales pudieron ejecutarse sin trabas y de manera expedita, entre las que destacan: a) la ampliación de horarios en comercios y eliminación de restricciones, b) reformas respecto al Fondo de Seguro de Depósitos (reducción del nivel objetivo), c) reformas al Reglamento de la Ley de Desarrollo Económico, d) mejora de normativa para el bunkereo y e) la reducción de tasas de la ASRCSA. De igual manera, se han identificado otras reformas que podrían ejecutarse de manera similar, entre las que constan: a) reformas al Reglamento de la Ley de Alianzas Públicas y Privadas, b) reformas a los requerimientos de reserva de liquidez (sector bancario), c) reducción del coeficiente de liquidez doméstica, d) calificación fiscal de Panamá, e) rebaja arancelaria para materias primas y bienes de capital, f) ampliación del listado de materias primas y bienes de capital sujetos a exención tributaria por pago de ISD, g) drawback simplificado, h) reutilización de aceites usados para procesos productivos, i) reforma al Reglamento de Sustancias Químicas, j) reglamentación para las inversiones del BIESS en títulos del sector privado.