Por: Rossana Viteri
Directora de Plan Internacional Ecuador

 

A pesar de los avances en la igualdad de género, la representación e inclusión de la mujer en espacios de toma de decisiones aún es baja. En el 2020, solo el 24,9% de quienes integran los parlamentos en todo el mundo eran mujeres.[i] En las ciencias solamente el 30% de investigadores y 35% de estudiantes de carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM por sus siglas en inglés) son mujeres.

Por otra parte, la crisis causada por el COVID-19 ha obligado a gran parte de la población mundial a estar en confinamiento y ha puesto en riesgo la igualdad de derechos y seguridad de las mujeres. Las niñas tienen mayor riesgo de deserción escolar frente a sus pares niños, y están enfrentando altos índices de violencia por internet. Según el Reporte Mundial de Plan International del 2020 “¿Libres para estar en Línea?”, en Ecuador el 60% de las encuestadas ha sido acosada y violentada en las redes sociales, y 1 de cada 2 ha enfrentado más acoso en línea que callejero. Por estos motivos, es primordial garantizar espacios seguros para que las niñas y jóvenes mujeres desarrollen sus habilidades y liderazgo.

Plan International trabaja por los derechos de la niñez y la igualdad de las niñas, para ello desarrolla múltiples proyectos para niñas y niños en zonas vulnerables del Ecuador, desde los 0 a los 24 años., El pasado 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, lanzamos el libro “Jóvenes que Inspiran” donde recopilamos los testimonios de 14 jóvenes mujeres y 3 hombres, quienes han sido participantes de los proyectos de Plan International en distintas etapas de sus vidas. La publicación da a conocer las luchas que estas y estos jóvenes han ganado para alcanzar sus metas y liderar el cambio en sus comunidades. “A todas las niñas que sufren trabajo infantil doméstico o violencia me gustaría decirles que no tengan miedo de expresar lo que sienten, de saber lo que quieren, y si desean jugarse por algo, que lo hagan. Que si quieren reír, rían, y que sean libres”, dice Samya, en uno de los testimonios del libro.

En base a testimonios, el libro narra sus historias personales, donde detallan los obstáculos a los que se enfrentaron desde su niñez y qué hicieron para superarlos. Las y los jóvenes retratan sus vivencias desde distintos sitios del Ecuador, muchos de estos en zonas rurales donde los recursos son más escasos. En cada testimonio, se puede apreciar un liderazgo inclusivo, horizontal y participativo. Liderazgo cuyo éxito está en juntar sinergias y voluntades hacia un objetivo; aquel que contribuya al bienestar común, que fortalezca el tejido social y que promueva el desarrollo de la niñez y juventud en nuestro país.

Las vivencias de las jóvenes enfatizan la importancia de estar en el centro de todo proyecto, discurso y decisión, y el poder que tiene cada una para transformar sus vidas y sus entornos. Es por esto, que Plan International sigue trabajando para fortalecer su autoestima y resiliencia, para desarrollar su pensamiento crítico y reflexivo y para impulsar su empoderamiento desde que son niñas. El libro es un homenaje a todas las jóvenes que están luchando para cambiar sus vidas y las de aquellos que les rodean. Las vivencias compartidas dan lecciones de valentía, resiliencia, pero también de alegría y amor por la vida. En este mes de la mujer, queremos inspirar a que todas y todos sigan los pasos de estas y estos jóvenes y promuevan la igualdad de oportunidades y liderazgo desde cada uno de sus espacios.

El lanzamiento del libro está acompañado de una exposición fotográfica de las 14 jóvenes. Estas imágenes muestran el día a día y las pasiones que las mueven a cumplir sus objetivos de cada día. La exposición está abierta al público en la Alianza Francesa en Quito, con previa reservación a asistentecultural@afquito.org.ec, o también está disponible en línea en este enlace https://plan.org.ec/jovenes-que-inspiran/

“La danza le ha dado sentido a mi existencia, ya que me ayuda a conocerme. Cuando bailo expreso si estoy triste o feliz, si tengo iras, siento que de esta manera me desahogo. En la danza me busco.” Angee

“Durante la semana que estuve en Madrid tuve algunas entrevistas en radio y televisión; como ya estaba acostumbrada a los micrófonos de la comunidad vecina, para mí no representó un gran esfuerzo hablar con los periodistas. Me sentía cómoda porque sabía que lo que decía era la realidad, que nada me estaba inventando, que era lo que nosotros sufríamos y pasábamos aquí en el campo.” Jessenia