Por: Marlene Astudillo Barba
Plan Internacional

A pesar de que ha pasado más de un siglo desde que Marie Curie ganara el Premio Nobel de Química, la travesía para que las niñas y mujeres se desenvuelvan libremente en campos de la tecnología y las ciencias no ha cambiado radicalmente.

La tecnología es una de las industrias más innovadoras, interesantes y prometedoras en la actualidad. Las tecnologías emergentes, como el machine learning, el internet de las cosas y la inteligencia artificial (IA), están abriendo paso en la mayoría de los aspectos de nuestras vidas, ratificándose como herramientas indiscutibles que transformarán y revolucionarán las compañías y la forma de aprender en la próxima década.

Sería fascinante saber lo que nos depara el futuro en cuanto a la tecnología y STEMs (ciencia, ingeniería y matemáticas), no podemos saberlo con certeza, pero sí podemos trabajar desde ya en la inclusión de niñas, adolescentes y jóvenes. Queremos que sean ellas quienes lideren estas áreas, más todavía conociendo los impedimentos que experimentan para incluirse en las STEM, o ser parte de la tecnología desde temprana edad. 

Las causas se podrían reconocer como multifactoriales. 

  • Desde lo social, los estereotipos de género presionan a las niñas a cumplir un rol específico y limitado. La falta de comunicación positiva sobre los beneficios y gratificación de las STEM, intensifica el estereotipo de que las niñas STEM requieren una ‘inteligencia superior’ para poder competir con los niños.
  • Desde lo individual, la postura de las generaciones actuales de mujeres en la sociedad es una lucha constante para demostrar su capacidad y valía, requieren un doble esfuerzo para sobresalir o llegar a sus metas es decir que implica un reto personal y profesional bastante alto para desempeñarse en una carrera STEM.
  • Desde lo familiar, se mantiene el rol tradicional de la mujer dentro de la familia, los juguetes que reciben son solo hechos para ‘niñas’ y no se les impulsa a realizar otro tipo de actividades que motivarían a que se relacionen a los temas de tecnología.
  • Desde lo educativo, no se percibe una intención real por parte de las/los maestras/os para que las niñas se involucren e interesen en materias como matemáticas o ciencias, en su lugar, se refuerzan estereotipos donde los niños son los que tienen una mayor capacidad para ello, por lo que abarcan más atención de los educadores.
  • Desde lo económico, los ambientes en los que las niñas crecen, determinan como un ‘sacrificio extra’ el brindar los espacios, implementos y equipos para desarrollarse como una niña STEM. En otros casos, no tienen los recursos suficientes para respaldar su desarrollo tecnológico.

A pesar de que la participación de las mujeres en las carreras de grado superior ha aumentado de manera exponencial durante la última década, ellas todavía están representadas de manera insuficiente en los campos relacionados con la ciencia, tecnología o ingeniería. De hecho, tanto la ciencia como la igualdad de género son aspectos claves para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que ha planteado la Organización de las Naciones Unidas en su agenda de 2030. 

 Según el estudio ‘Mujeres y hombres del Ecuador en cifras III’ que reúne estadísticas del último censo poblacional del país (INEC, 2010) en carreras universitarias como la Ingeniería en Informática, un 34% de estudiantes son mujeres, mientras que en maestrías como Gestión Informática Empresarial el porcentaje baja a 14%. Asimismo, de acuerdo con un estudio realizado en 14 países, la probabilidad de que las estudiantes finalicen una licenciatura, maestría o doctorado en alguna materia relacionada con la ciencia es del 18%, 8% y 2%, la historia es otra si los estudiantes son masculinos, las cifras aumentan al 37%, 18% y 6%, declaró la ONU. Las niñas son necesarias en el ámbito de la tecnología, si esto no ocurre ahora, el futuro no es prometedor. Se mantendrá la discriminación e incluso aumentarán las brechas salariales, ausencia de oportunidades en entornos de educación STEM y oportunidades laborales. 

Proyectos que impulsan a la próxima generación de las niñas a ser parte del área tecnológica 

 Las acciones son necesarias, Plan International Ecuador identificó esta necesidad, como organización de desarrollo y humanitaria que trabaja por un mundo justo y promueve los derechos de la niñez y la igualdad de las niñas.

Todo comenzó con la identificación de un problema: la baja participación femenina en el campo de la tecnología, ingeniería y matemáticas en el Ecuador. Al conocer los datos de la Organización Internacional del Trabajo OIT (2020), donde se expone que en un futuro cercano se esperaría que la demanda de trabajo juvenil incremente los campos STEM. Si las mujeres no adquieren conocimientos y habilidades en estas áreas, tendrán menos oportunidades de ser parte del mercado laboral.

Plan International Ecuador ha llevado a cabo distintos proyectos, arrancando con el objetivo de acercar a las adolescentes al mundo tecnológico y científico a través de la motivación y el empoderamiento, adquiriendo conocimientos y habilidades digitales con la guía de mentoras para fomentar sus vocaciones.

Más aún, ha promovido alianzas con distintas organizaciones para potenciar las habilidades de las niñas y jóvenes, una de ellas con el Municipio de Guayaquil, con la iniciativa del ‘Bus Digital’ en la cual se capacitaba a familias con respecto al uso adecuado de las computadoras, cómo acceder a internet, el uso de la tecnología e incluso cómo redactar un currículum para el desarrollo profesional de las participantes. De la mano de Girls In Tech, promueven la empleabilidad de mujeres jóvenes a través de capacitaciones en Social Media Marketing, el manejo de redes sociales. También, en el Parque de la Ciencia AJA de la ESPOL, se impulsó a 80 niñas quienes despertaron su curiosidad por las ciencias, con el objetivo de que se motiven a encaminar su futuro a escoger carreras relacionadas con esta rama.

 En la emergencia sanitaria Covid -19, Plan Internacional ha dirigido todos sus esfuerzos para continuar impactando positivamente en la vida de niñas y mujeres jóvenes. Con las participantes del Movimiento Por Ser Niña de Ecuador, grupo autónomo de la sociedad civil que nació en 2018, se implementaron más de 20 sesiones en línea a cerca de 200 jóvenes lideresas. Su objetivo fue el desarrollo de herramientas para responder y enfrentar situaciones de violencia durante y después de la emergencia, facilitar el acceso a internet y fortalecer las competencias digitales.

Plan International se está preparando para un día sumamente especial, el 11 de octubre, Día Internacional y Nacional de la Niña. En esta fecha, la organización pondrá de manifiesto el limitado acceso a internet, la ausencia de dispositivos móviles, el acoso o abuso que enfrentan en la web, y los estragos que la falta de recursos tecnológicos en plena emergencia sanitaria ha reflejado menos acceso a la educación. 

Con la campaña #ConectadasYSeguras la organización espera encaminar la vida de niñas y jóvenes del Ecuador, exponer los riesgos y necesidades que han evidenciado, de forma que empresas, instituciones y socios se unan a esta iniciativa de suma importancia. Para Plan International, el que las niñas, adolescentes y jóvenes mujeres fortalezcan la confianza en sí mismas, construyan un proyecto de vida y adquieran conocimientos y habilidades tecnológicas, es esencial para su desarrollo en el actual marco social. Visualizamos un futuro próximo para las niñas, que con ayuda de organizaciones como Plan International, con igualdad de poder, libertad y representación, aseguran que cada una pueda decidir sobre su propia vida, sus aspiraciones, y el mundo que la rodea.