José Antón Bucaram, presidente de PICA Plásticos Industriales, es una figura destacada en el mundo empresarial ecuatoriano y ha sido reconocido como el Mejor Industrial 2023 por la Cámara de Industrias de Guayaquil. Con una impresionante trayectoria en la industria de plásticos, José Antón es conocido por su liderazgo visionario y su enfoque en la innovación y la calidad. En esta entrevista, exploraremos su fascinante carrera, el progreso de PICA a lo largo de los años y algunas anécdotas de sus experiencias en el mundo empresarial.
¿Qué significa este reconocimiento para Usted y su empresa?
La obra industrial per se es una labor de equipo, por la naturaleza misma de lo que es una industria, y más aún una industria manufacturera.
Un reconocimiento de este tipo no puede ser unipersonal de ninguna manera; es un reconocimiento a todo el equipo, y no solo al equipo actual, sino a todos quienes han formado parte de la historia de PICA. Y eso es lo importante para mí, lograr que esta distinción la sientan como propia.
La parte humana en toda empresa es fundamental para el desarrollo de la misma; esto lo aprendí de mi padre, José Antón Díaz y de Luis Naranjo. El día que llegué a la empresa, de lo primero que me habló mi padre fue de la gente; y la única vez que hablé de trabajo con Luis Naranjo, recuerdo que solo me habló de las personas.
PICA ha experimentado un notable progreso a lo largo de los años. ¿Cuáles considera que han sido los factores claves que han contribuido al éxito continuo de la empresa?
Lo primero es, como en todo negocio, tener claras las acciones que te ayudarán a cubrir los costos fijos. Lo demás, es donde realmente estará la utilidad y el beneficio.
A nivel cultural, es fundamental la mentalidad para ver las cosas más allá, y con ello lograr mantener un equipo de trabajo en permanente innovación. Nuestra norma es no replicar otros productos del mercado, obviamente tomamos ideas de afuera, pero la norma es agregar valor y diferenciarnos. Para ello, creamos el Departamento de Desarrollo de Nuevas Ideas, Productos y Líneas, que está totalmente profesionalizado y trabaja de una manera independiente, esto ha sido fundamental para el crecimiento de la empresa.
Recuerdo cuando nosotros comenzamos a fabricar sillas plásticas en el país, en los años ´90s, empezamos con aproximadamente 2000 unidades mensuales… yo estimo que hasta la actualidad hemos fabricado al menos una vez y media la población del Ecuador en sillas. Pero nuestro objetivo no fue solo masificar el producto, sino también crear para nuestro público la más amplia variedad de sillas, para infinidad de aplicaciones, y en rangos de precios que van desde los $5 hasta los $35.
¿Cuál considera que es la huella que ha marcado su trayectoria en PICA?
La huella más importante es haber logrado el cambio de una organización patriarcal -con la figura de un ídolo para mí y para muchos- a convertir a PICA en una industria profesional y autónoma, que está preparada para hacer frente a un mercado global y competitivo, independientemente de quien ocupe la dirección de la empresa.
En cuestión de crecimiento e infraestructura, el proyecto de cambio hacia nuestra planta actual fue una labor titánica, por la que tuve hasta resistencia interna en la familia… fue un logro para mi haber conseguido cambiar esa mentalidad, que mis hermanas -que son mis socias- e incluso mis sobrinos, participen indirectamente en los asuntos de la empresa, crean y apuesten en ella, que adopten esta visión de crecimiento. ¡Llegar a lo que somos hoy, no hubiera sido imposible sin haber dado ese gran paso!
La innovación es a menudo un componente importante en la industria manufacturera. ¿Puede compartir algunos ejemplos de innovaciones destacadas que PICA haya implementado durante su liderazgo?
Hemos ampliado nuestro horizonte, involucrándonos también en las grandes industrias de exportación del país. Ha sido importante estar al lado de la industria camaronera, y pendientes de la industria bananera y de otros grandes o crecientes sectores de exportación, ofreciéndoles soluciones en sus procesos productivos y logísticos.
Fue un cambio de modelo de negocio muy importante, pasar de ser proveedores de productos y servicios para el hogar, a ser proveedores del sector institucional, industrial y comercial.
Hoy en día, nos complace contribuir de manera importante con los sectores productivos del país, con proyectos desarrollados a la medida de nuestros clientes, entendiendo sus procesos y sus necesidades.
El compromiso con la responsabilidad social empresarial es importante en la actualidad. ¿Qué iniciativas de responsabilidad social ha liderado PICA para contribuir al bienestar de la comunidad o el medio ambiente?
Mi compromiso ambiental se fortalece cuando nace el proyecto Cemdes, en los años 80s. Nuestro socio Stephan Schmidheiny, un apasionado por la sostenibilidad, y fundador del Consejo Empresarial para el Desarrollo Sostenible Mundial; en una de sus visitas al país me dijo, “quiero que hagas el capítulo Ecuador”.
La creación de Cemdes, me llevo a descubrir y desarrollar esa vena, a creer en ella bajo una visión de sostenibilidad y equilibrio con el bienestar y el desarrollo del ser humano; yo no soy un extremista verde, pero sí soy un convencido de la necesidad que tiene el sector productivo de trabajar en iniciativas ambientales.
En PICA aplicamos tecnologías productivas eficientes, promovemos la correcta clasificación de desechos y contamos con una línea de productos fabricados con material reciclado, a lo cual sumamos en los últimos años conceptos de bio-resinas, siendo Bio Coffee nuestra más reciente innovacion.
Como empresario y como guayaquileño, contamos con que la ciudad y el país adopten pronto un sistema de clasificación de desechos, es un tema que debe ganar prioridad en la agenda de los gobernantes.